Aerodeslizadores del futuro

¿Quién no ha soñado con desplazarse con un monopatín como el de Regreso al Futuro o en una autonave como Los Supersónicos?

Puede ser que aún estemos lejos de lograr ese objetivo, pero poco a poco parece que vamos consiguiendo despegar del suelo a pequeña escala…

De momento la empresa Airboard nos ofrece un aerodeslizador personal que se despega del suelo 20 centímetros gracias a un cojín de aire y puede alcanzar alrededor de 30 kilómetros por hora.

Adrenalina a tope

Con un tanque de 5 litros disfrutaremos de una autonomía de una hora, lo que permitiría pequeños viajes como ir al trabajo sin tener que preocuparse por el aparcamiento.

Pero lo que realmente hace subir la adrenalina es la posibilidad de realizar maniobras cerradas de 360º, subir por superficies de hasta 30º de inclinación y saltar obstáculos de cerca de 40 centímetros.

Asfalto y hormigón su reino

Está específicamente hecho para deslizarse por superficies duras, pudiendo desplazarse sin problemas por asfalto, pavimento, hormigón. Siempre que estén limpios de piedras u otra clase de depósitos no habrá problemas.

También puede deslizarse por zonas húmedas y por la hierba recién cortada, pero es incompatible con la arena y el agua.

Cabalgando el aire

Al igual que con las motos, a su conducción se la llama «cabalgar» por la «similitud» que tiene la forma de dirigirlo con el cuerpo a la de llevar un caballo, salvando la multitud de diferencias.

Dos palancas colocadas en el manillar son las que controlan el empuje y la velocidad, mientras que la dirección hay que imprimirlas con la inclinación del cuerpo. Además, se pueden dar saltos para tomar las curvas o esquivar algún obstáculo.

Potencia limpia

Con su arranque eléctrico, lo único que deberemos ajustar es el acelerador y practicar un poco, cambiando el peso de un lado a otro, para encontrar el equilibrio necesario que nos hará poder domarlo y divertirnos llevándolo al límite.

Su motor Briggs & Stratton de 4 tiempos utiliza combustible sin plomo con un mínimo de 85 octanos, así que unido al arranque eléctrico nos da una combinación energética limpia.

Hay que comprobar nuestro peso

Tiene una capacidad de frenado de unos 6 metros yendo a 25 kilómetros por hora, por lo que habrá que practicar bien la ejecución del frenado si no queremos tener un percance.

En cuanto a las dimensiones, tiene un diámetro de 1’65 metros, por 30 centímetros de altura de cubierta y 1’2 metros el mango. Su peso aproximado es de 70 kg y puede llegar a soportar otros 120 kg.

Solamente se construye en colores básicos, pero un buen tuneado le dará el toque personal que precisa.