Gliding: planeando el mundo sin motor.

Conocido mundialmente como gliding o soaring, este deporte iniciado en los años 20 consta de un planeador que se asemeja íntegramente a la estructura de un aeroplano con una única gran diferencia: carece de motor.

Los vuelos se inician remolcando el planeador por un avión que posee la suficiente fuerza como para despegar junto a su carga y una vez que se lo libera en las alturas el planeador buscara las corrientes de aire caliente para mantenerse en vuelo durante incluso miles de kilómetros.

Dependen pura y exclusivamente del humor de la madre naturaleza para poder realizar sus viajes, incluso cuando el clima se torna inestable en pleno vuelo los pilotos deben forzar un aterrizaje ya que un viento demasiado fuerte puede desnivelar la nave causando una tragedia.

Los aterrizajes forzosos suelen realizar en campos abiertos, algunos aficionados que se rehúsan a acatar las inclemencias de la natura equipan los planeadores con pequeños motores que los mantendrán a flote durante algún tiempo más.  

Practica

Se debe contar con el artefacto en cuestión aunque también es posible rentar uno para prácticas en hangares especializados en la materia.

Los costos varían mucho de país en país aunque el precio base se encuentra en el costo del combustible que utilizara el avión que facilitara el despegue del planeador.

Al estar desprovistos de toda fuerza mecánica que los impulse por los aires, los pilotos se valen principalmente de las corrientes de aire caliente que circundan el globo.

Estas corrientes son las que le otorgan a ese deporte toda su magia y belleza, logrando con la ausencia del ruido de un motor crear la ilusión perfecta de que se esta realmente volando.

Glidder siendo remolcado por un aeroplano.

Cross-Country o como atravesar un país sin gastar un euro en gasolina

Eso si que es un vuelo realmente “verde” ¿verdad? Esta modalidad de soaring es muy famosa en los países de Europa, tornando este deporte en un verdadero desafío para los pilotos. Diversas técnicas se emplean para lograr este fin con éxito, la más famosa conocida como la técnica del delfín consiste en emular los movimientos de este animal recreando con el planeador una especie de surfeo entre las corrientes de aire para poder alcanzar así grades distancias.  

Rentabilidad

A primera vista creeremos que este es un deporte que pertenece solamente a los ricos y privilegiados, pero estamos en un gran error si creemos que esto es así: un glider puede costar tan solo 2000 euros y no olvidemos que puede ser adquirido entre varios amigos. Obviamente que es tan solo el precio inicial, tenemos gliders que alcanzan los 120000 euros sobrepasando varias veces el precio de un Cessna