Practicar surf en las playas españolas

El surf es uno de los deportes de aventura más practicados en todo el mundo. Basta con tener una buena tabla y esperar a una buena ola para hacer de este deporte algo mágico. El resto solo es dejarse llevar y disfrutar de la experiencia.

Todo buen surfero se pasa la vida buscando la ola perfecta, la gran ola. Incluso los más afortunados dedican parte de su vida y de su tiempo para viajar a aquellos rincones del mundo en los que practicar este arriesgado deporte es un gran arte. Y entre esos lugares, amigos míos, se encuentran algunas playas españolas.

Andalucía, destino turístico para los surferos

Como no podía ser de otra manera, Andalucía, una de las mayores regiones de nuestro país, cuenta con algunas de las playas más famosas para practicar este deporte. Entre ellas se encuentran las playas de Tarifa y de Algeciras. Ambas localidades de la provincia de Cádiz cuentan con el gran requisito a la hora de hacer surf: el viento, lo que se traduce en grandes y numerosas olas.

En estas ciudades podemos encontrar todo lo necesario para buena práctica de surf, desde las mejores tablas y neoprenos hasta grandes academias en las que algunos expertos enseñan a los principiantes algunos trucos para conquistar las grandes olas del estrecho.

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Asturias y País Vasco, el paraíso cántabro

En el otro extremo del país, en Asturias y en el País Vasco, podemos encontrar varias playas ideales para deportes acuáticos de aventuras entre los que se encuentra el surf. En el País Vasco se encuentra una de las playas más famosas del mundo. Mundaka, en la desembocadura del río Guernica, ofrece grandes olas de hasta dos y tres metros de altura que pueden alcanzar una longitud de recorrido de hasta 400 metros.

Por su parte, Asturias cuenta con la gran perla cántabra, Rodiles, que si bien ofrece olas en ocasiones más pequeñas que las de Mundaka, tienen la ventaja de ser mucho más fuertes y resistentes, lo que las hace ideales para el surf.

Mucho más

Pero más allá de estos lugares, España es considerado como un gran paraíso suerfero, ya que cuenta con grandes olas en playas del archipiélago canario, en las islas de Tenerife y Gran Canaria, donde surfear se convierte en una grata experiencia no solo por el mero hecho de subirnos a la tabla, sino por hacerlo en uno de los lugares más hermosos y paradisiacos de nuestra geografía, en mitad del Atlántico.