La muerte de Álvaro Bultó. Un aventurero que rompió barreras

Aunque ya haya pasado casi un mes desde que perdiéramos a una de las figuras más destacables y representantes para todos los que nos apasiona la aventura y el deporte, es imperdonable no dedicar unas líneas a recordar la figura de Álvaro Bultó.

Y es que todos los que practicamos estas actividades de riesgo sabemos lo fácil que es ir andando por esa fina línea entre la vida y la muerte. Pero aunque para algunos parezca acciones casi suicidas, tenemos que recordar que los profesional nunca se lanza sin revisar y supervisar los distintos medios de seguridad con los que se trabaja, probando que todo esté en perfectas condiciones. Nada se hace a la ligera. Pero a veces, sin saber cómo ni porque, las cosas fallan y acaban de las peores de las formas.

Como ya sabéis, Álvaro murió el 23 de Agosto, en los Alpes Suizos, cuando practicando wingfly, las alas de su traje no se desplegaron. Aun así, queremos hacer hincapié de todo lo que consiguió, y recordarlo como lo que fue, un gran deportista y comunicador, amante del riesgo.

El riesgo y velocidad en la sangre

Bultó nació en Barcelona hace 51 años. Los que le conocían sabía que su afición no nació de la nada, ya que su familia eran empresarios de la fábrica de motos Montesa. Lo que también explica la profesión de su sobrino, Sete Gibernau.

De esta afición que une a toda su familia, participo en campeonatos de motocross así como en varios Rally Dakar.  Pero sin duda en lo que siempre destaco fue en deportes de riesgo, de manera especial en caída libre, donde batió récord.

Pero también otras actividades que le dieron fama mundial, como fue escalar la pared más alta del ártico en Groenlandia, ser el primer español en sobrevolar con traje de alas el Polo Norte y unas de las primeras personas que se atrevió en saltar en paracaídas sobre la Antártida.

El riesgo en la pequeña pantalla

Tal fue su implicación con esta filosofía y forma de vida, que Televisión Española lo tuvo claro cuando le propuso que durante muchos años dirigiera y presentara el programa “Frontera Limite” (1994), en La 2.

Álvaro fue un hombre que disfrutó de la vida como nadie. Volando más alto de lo que seremos capaces ninguno. Por eso desde esta página le recordaremos siempre, de la mejor forma que sabemos. Promocionando el deporte y la aventura, tal como él lo hizo en vida.