Kitesurf, deportes que enganchan mucho… ¡muchísimo!

Hay veces que con solo leer una palabra ya sabes que lo que viene detrás te va a emocionar gratamente. Y más si está compuesta por la terminación -surf. Ya te puedes hacer una idea de que este deporte malo, lo que es malo, no va a ser.

Para a los que este deporte les pille un poco de nuevas recordar que hablamos del kitesurf como una disciplina basada en el surfing, por lo cual también es considerado un deporte de deslizamiento, que consiste en el uso de una cometa como aparato de tracción o impulsor.

Este deporte se divide en varias modalidades, dependiendo del gusto y especialidad de cada uno de sus seguidores. Así pues tenemos la de saltos y maniobras (también llamado freestyle), regatas entre boyas y el más clásico, surf entre olas.

Sus orígenes

Aunque es ahora cuando más se ven este tipo de prácticas en las playas de todo el mundo,  fue en 1977 cuando se empezó a conocer como deporte. Ya que su invención tiene como origen milenario en China e Indonesia, donde ya lo inventaron como medio de trasporte, siendo sus utensilios verdaderas obras de arte y diseño.

Lo importante en la iniciación

Para empezar es un deporte de los que es mejor probar antes que volverse loco con él, lo cual es fácil. Para ello los expertos siempre recomiendan hacer un curso de iniciación. Puedes encontrar algunos tan interesantes como los que ofrece la escuela deportiva de  Kiteboarding, en Valencia, curso intensivo de 4 horas reducidos a dos personas e impartidos por un instructor especializado.

Esta clase de cursos te garantizaran aprender de manera personalizada, aparte de manejar y aprender a manejar el deporte y los materiales, las normas básicas de seguridad e incluso de rescate para evitar momentos de tensión producidos por rotura de material, caídas, etc.

No hay que tomarse a la ligera esto, pues en inexpertos puede resultar una practica peligrosa para ellos como para las personas que hay a su alrededor.

Como parte un equipamiento básico necesitaremos, primordialmente, una tabla y una cometa, obviamente. También una barra de dirección para guiar la cometa, un arnés que ira sujeto a la cometa y lograra que nos elevemos y un grupo de 2 a 5 líneas (cuerdas de sujeción a la cometa).

Como medida de seguridad nos haremos con un casco, chaleco salvavidas y traje de neopreno.

Mucho más que un deporte, una forma de vida

Como en toda la filosofía que engloba el mundo del surf, en esta también encontramos ese hermanamiento entre sus usuarios y esas ganas de vivir la vida a partir del amor y respeto por la naturaleza y una dependencia masiva a la adrenalina que da esta clase de deportes.

Una afición que reúne a muchos los días de viento y oleaje y que hace que al igual que una gran familia, se respeten y vayan creciendo en habilidades observándose y mejorando sus técnicas aprendiendo los unos de los otros unos de otros.

Esta relación que nace de un hobby común poco a poco va pasando a un nivel. Pasando tardes enteras entre música, comida, energía positiva hasta que cae el sol. Formándose así en la mayoría de los casos una amistad perdurable en el tiempo entorno al mar.