Los únicos requisitos para participar en el Maroc Chalenge son unas infinitas ganas de aventura y pilotar un vehículo clásico. No son precisos los coches de gran potencia ni equipos enormes. Se trata de un auténtico raid de bajo coste.
El Maroc Chalenge nos invita a recorrer 2.000 kilómetros atravesando desiertos y montañas a lo largo y ancho de las tierras del Reino alauí sin necesidad de estar mirando el cronómetro: no se trata de una carrera de velocidad, sino que cada cual ha de conocer sus límites y sus posibilidades en cuanto al ritmo.
Lo único que hay que hacer para participar es inscribirse con un coche antiguo. De hecho, si no lo tenemos, a partir de 300 euros es fácil encontrarlo. No es preciso presentar palmarés de ningún tipo. Podemos inscribirnos incluso aunque no sepamos lo que es participar en un raid. EL verdadero objetico del Maroc Chalenge es pasárselo bien y, si somos capaces de ello, llegar a la playa de Essaouira.
Auténtico bajo coste
De lo único que se va a ocupar la organización es de asesorarnos en cuanto a la financiación, de proporcionarnos el recorrido y de abrirnos un espacio web personalizable para que nuestros amigos sepan en todo momento cuánto estamos disfrutando.
Pero hemos hablado de que, además de ser una prueba de bajo coste es también un proyecto solidario. La organización se vuelca, según la web oficial del raid en “desarrollar pequeños proyectos con objetivos específicos que podamos asumir con la colaboración y las aportaciones de empresas amigas, personas sensibles y por supuesto con los propios participantes del Raid Maroc Challenge.”
Solidaridad, deporte y diversión
Concretamente, este año la idea es ayudar al pueblo de Hassi el Begaa, en la zona de Merzouga a las puertas del desierto de Erg Chebbi. La idea es dotar a cada uno de los cincuenta alumnos de la escuela local de material escolar, así como al aula de material didáctico y lúdico.
Y los objetivos para la prueba de Marzo de 2013 se refieren a conseguir más material para el centro y sus escolares, crear una pequeña biblioteca con cuentos y libros tanto en francés como en árabe, restaurar las instalaciones, de modo que cada maestro cuente con su propia aula. Y, finalmente, más allá de la escuela, instalar una nueva bomba en un pozo que ya existe, de modo que pueda aumentarse la superficie cultivable.
Podemos inscribirnos, pero ya para la edición de Marzo en http://marocchallenge.es