El senderismo es un deporte que proporciona una gran satisfacción personal y que no es nada competitivo, al contrario, puede ser de colaboración y trabajo de grupo. Muchas personas, practican esta actividad en solitario para desconectar de la rutina y pensar en sus cosas mientras disfrutan de la naturaleza.
El objetivo de este deporte no es tan solo mejorar físicamente, sino que también proporciona mejoras psicológicas (tiene efectos muy beneficiosos contra el estrés y la ansiedad). En los niños fomenta valores de respeto a la naturaleza y superación personal.
¿Quién crea las señales de los senderos?
En España las rutas de senderismo oficiales están a cargo de tres organismos diferentes:
– A nivel de toda España está la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada. Se ocupa preferentemente de los senderos de largo recorrido.
– Las Federaciones Territoriales y Autonómicas. Se ocupan de la homologación de todo tipo de senderos y de registrarlos, clasificarlos y señalizarlos.
– Las estructuras locales. Colaboran con las Federaciones Territoriales a nivel de su territorio.
Tipos de señales y senderos
En primer lugar, podemos distinguir entre dos grandes grupos de senderos, los no homologados y los homologados. Los homologados están autorizados y revisados por el FEDME y las Federaciones Autonómicas y los no homologados no.
Senderos homologados
En primer lugar, existen los senderos locales, que son más cortos que los demás y son autorizados por las poblaciones territoriales y por las FFAA. Su recorrido no puede ser mayor de 10 kilómetros y son los más sencillos de realizar (perfectos para iniciarnos en este deporte). Se identifican con colores blancos y verdes.
Después de estos, tenemos los senderos de Pequeño Recorrido (PR), este tipo de sendero nunca superan los 55 km. Se señalizan con las franjas amarillas y blancas y son los más comunes, ya que en una mañana la mayoría se pueden recorrer. También les corresponde a las FFAA y Federaciones Territoriales su gestión.
Finalmente tenemos los senderos de Gran Recorrido (GR), gestionados por la FEDME. Estos se identifican con los colores rojos y blanco y son senderos de gran recorrido (más de 55 km). Es muy importante seguir estas rutas de colores para no equivocarnos antes de realizar cualquier camino.
Senderos no Homologados
Hay muchos tipos de senderos no oficiales y cada uno tiene una clase diferente de señalización, como senderos naturales, rutas naturales, caminos verdes. El único requisito que FEDME hace para señalizar estos caminos es que no se confunda con la señalización aprobada y que, si una señalización aprobada y no aprobada se encuentra en la misma ubicación, la señal aprobada resalte más.
Variantes, derivaciones y enlaces
Las variantes son caminos que comienzan desde un sendero principal y regresan a este más a delante. Su dificultad dependerá del tipo de camino que se desvíe y la numeración es la misma que para la carretera principal, seguida de un punto y un número.
Los enlaces son secciones que vinculan diferentes rutas homologadas.
Las desviaciones son secciones que comienzan desde un camino aprobado y conducen a un lugar de interés turístico, ya sea un monumento, un sitio natural, un sitio histórico, un punto de vista, etc.
En los senderos homologados también podemos hablar de las pistas europeas (E), que consisten en carreteras GR que deben pasar al menos por tres países diferentes y están gestionadas por la ERA.
Señales de senderismo según la dirección
Las más comunes son aquellas que señalan la existencia de un cambio brusco de dirección, las que avisan de una dirección equivocada y las que te muestran un cambio de dirección.
Todas las señales llevan los colores indicados anteriormente para que en todo momento sepamos en qué tipo de camino estamos. Las variantes pueden cambiar de color ya que la variante puede tener una dificultad diferente a la del camino original.
Dificultad de los senderos
Otro aspecto a considerar al elegir en que ruta vivir nuestra próxima aventura es la dificultad que tienen. Para esto, FEDME y muchas otras organizaciones recomiendan el uso del Método de Información de Excursión o MIDE.
MIDE consiste en proporcionar una serie de datos sobre la ruta y medir una serie de factores que nos dan una información de evaluación. Como resultado, obtenemos una tabla que nos da una idea general de la dificultad que traerá el recorrido.
Los datos que nos proporcionan antes de realizar una ruta homologada son: excursión que se especifica (donde comienza y termina), horario de la excursión, pendiente positiva acumulada, pendiente negativa acumulada, distancia horizontal, tipo de ruta (itinerario de ida y vuelta, circular o intersección), tiempo y / o condiciones especiales para las cuales se aplica la valoración y dificultades técnicas específicas.