Febrero se fue y nos ha dejado unos días de perros, de lluvia, nieve y mucho viento. Que no dejan al cuerpo nada más que las ganas e imaginar nuevas rutas. No desesperes, la primavera está al llegar en un mes con varios puentes y días para disfrutar y contemplar la naturaleza.
La cimbara es un paraje natural, en Sierra Morena, Aldeaquemada (Jaén), donde se nos ofrece un espectáculo natural sin igual, con su increíble cascada bautizada con el mismo nombre que el paraje, que es resultado del río Guarrizas, que nos sirve de guía para esta deliciosa ruta de senderismo.
Senderismo en la Cimbarra, ideal para principiantes
Esta es una ruta segura, señalizada por postes con flechas. Una senda bien marcada desde el llamado “patio de armas”, ascendiendo hasta llegar a una especie de mirador, un rocaje donde podemos contemplar y oír el agua caer por la garganta que el río ha ocasionado a lo largo de miles de años, aprovechando una falla sobre un enorme pliegue, que se recorre sin dificultad.
Seguiremos el sendero por una pendiente hasta llegar a un barquillo, donde el sendero se divide en dos:
Las dos rutas
A) Hacia abajo, llegaremos al pie de la cascada que aunque se llega con facilidad, no es recomendable hacerlo con niños o si no se va con deportivas o botas. Desde aquí, se acaba el pavimento y hay que ser precavido en la bajada, llegando a un mirador frente a la cascada, con una vista inmejorable.
B) La otra senda sube haciendo un recorrido circular. Llegando hasta un mirador, esta vez con valla protectora, y en el que podemos observar una gran vista aérea de la cascada, la poza y toda la garganta del río. Desde aquí nos conducirá el camino hasta otra senda de pendiente muy suave hasta llegar otra vez al patio de armas.
TIEMPO ESTIMADO: 1 o 2 horas
DIFICULTAD: Media
EDAD MINIMA: 6 años
DESNIVEL: 90 metros
CARTOGRAFIA: Hoja 863 Aldeaquemada, escala 1:50.000
RECOMENDACIONES:
– Ideal para visitar en primavera. Desaconsejable en verano, ya que la cascada ve reducido su trasporte de agua y es zona donde el calor puede pegar muy fuerte.
– Evitar visitas después de lluvia, ya que por sus desniveles se convierte en una zona muy resbaladiza.
– Los niños, siempre vigilados por ser zona muy escarpada.
– La poza no es apta para el baño, por su fondo inestable lleno de ramaje.
– Un lugar muy recomendable lleno de naturaleza, entre el rocaje de Despeñaperros.