Salto base: una experiencia de altura

Los más cinéfilos recordarán algunas escenas de películas, como por ejemplo cuando Eduardo Noriega salta desde un edificio en la Gran Vía madrileña, en la película “Abre los Ojos”.

Esa adrenalina, miedo y la vida pasando delante de los ojos… Eso es lo típico que se dice. ¿Y si te digo que existe la posibilidad de comprobar esta experiencia de una forma segura?

El deporte extremo más arriesgado

El salto base es una disciplina de paracaidismo que consiste en saltar desde un punto fijo y no desde una aeronave en vuelo. Lo de BASE es un juego de palabras en inglés que hace referencia a las cuatro categorías de objetos desde los que saltar:

Building- Edificio

Antenna- Antenas (chimeneas o torres de tendido eléctrico)

Span- Puente

Earth- Tierras (precipicios)

Esta tendencia deportiva es considerada por muchos como la más salvaje de los deportes extremos. Ya que el riesgo es muy alto, sin embargo siempre está controlado y calculado.

Normalmente se utiliza un tipo de paracaídas diferente al del paracaidismo aéreo. Esto es porque la caída es más corta que en un vuelo en aeronave, por lo cual un paracaídas normal no tendría tiempo de activarse, por eso se utiliza el que normalmente se lleva de reserva.

El punto más alto desde donde practicar esta tendencia es Kjerag, en Noruega, a una altura de 600 m. Recordamos que antes de practicar esta disciplina hay que dominar la caída libre.

Saltar en España

En el territorio Español nos encontramos principalmente el escenario de Los Mallos de Riglos, Huesca. Normalmente escenario de escalada que sirve de referencia para todas las escuelas de Europa. Pero que miran también con ojos golosos los salta basistas y que sirve como plataforma de lanzamiento para estos saltos.

Y esto es gracias a sus 280 metros de altura que le dan el título de la pared española con más sensación de vació. Solo has de colocarte en la piedra, inclinarte y dejar que la gravedad haga su trabajo. Una sensación que solo dura unos 3 o 6 segundos, pero muy adictiva.

 ¡A la escuela!

En España nos encontramos con la asociación ASBA. Que ofertan cursos de salto base a través de la  Academia de ProBASE, quienes aseguran ser el centro de aprendizaje internacional más moderno de Europa. Con cursos básicos, avanzados, de plegado, iniciación al vuelo con alas y una amplia gama.

Desde luego, una experiencia única y no creo que sea la última. Recuerda que para iniciarse en este deporte se necesita una experiencia mínima de 150 saltos desde avión o aeronave. ¡Así que ponte a volar ya!